Hace poco hice en Wikipedia
un gran descubrimiento:
Blancanieves existió de verdad.
Los hermanos Grimm nos contaron
algo más que un cuento.
Vivía en el castillo de Lohr,
un pueblo de Franconia,
al sur de la actual Alemania.
De tan joven, buena y bella
era querida y deseada
por toda la comarca.
Su madre murió joven,
depositando en ella
todas sus esperanzas.
Su padre, un rico diplomático,
que pisaba poco por casa.
Una mujer envidiosa, su madrastra,
con un espejo que le gritaba:
“Nunca serás más hermosa que ella
A no ser que consigas matarla”.
Y para acabar en la flor de su vida,
alguna manzana envenenada.
Aquí termina el cuento.
No hay príncipe ni enanos.
Tal vez sólo minas y montañas.
Así se pudrió en la tierra
la tan joven, buena y bella,
tal y como la soñó su madre,
cuando estando embarazada de ella
se pinchó con una rueca:
“Su pelo negro como el ébano.
Sus labios rojos como la sangre.
Su piel blanca como la nieve”.
Pero como dijo Wordsworth, creo:
“No hay que afligirse.
Pues la belleza pervive en el recuerdo.”
Y así es como la soñé hoy despierto:
Vestida de blanco, bailando, riendo.
Su piel blanca como la nieve.
Sus labios rojos como la sangre.
Negro como el ébano su pelo.
http://es.wikipedia.org/wiki/Blancanieves
2 comentarios:
I'm not sure about my reaction.... Amazing I'd say... but there is not that option.
Hats-off. Keep on writting!!
See you in December!
Álvaro.
Gracias Álvaro.
Pues nos vemos pronto entonces.
Un fuerte abrazo.
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