jueves, 6 de enero de 2011

I

A veces me despierto
creyendo estar en ti
y entonces eres un denso mar
que empapa mi cuarto.
A veces me despierto
pensando no ser yo,
pues la esencia de tu ser
desborda los límites de mi cuerpo.
A veces me despierto
y no me despierto,
porque tú eres sueño
y no sueño.